jueves, 1 de octubre de 2009

Muertes de filósofos: La Mettrie


Nombre: Julien Offray de La Mettrie.

Edad en el momento de morir: 42 años.

Fecha y lugar de muerte: 11 de noviembre de 1751, Berlín.

Causa de muerte: Indigestión por pâté de faisan aux truffes.

Descripción: La Mettrie, médico francés y filósofo materialista. Su sistema de pensamiento fue una reacción contra el dualismo mente-cuerpo cartesiano. En su obra capital, El hombre máquina, defendió la idea de que el cuerpo humano es como una máquina, y que los estados psíquicos están estrechamente correlacionados con los estados físicos. Así, por ejemplo, la enfermedad nos baja el ánimo, el opio nos puede hacer creer que somos vampiros, o comer carne poco hecha y sangrienta hace que los ingleses sean un pueblo salvaje y fiero. Es decir, los estados del alma son producidos por los del cuerpo. Pero no hay que entender el alma como una substancia distinta al cuerpo, ya que La Mettrie defendía un materialismo monista: la única realidad existente es la materia, la Naturaleza.

No hay, para nuestro filósofo-médico (o médico-filósofo -para él sólo los filósofos que además son médicos pueden entender completamente al ser humano-) otra substancia que no sea la materia. No existe, por tanto, Dios ni ningún otro ser superior. La moral no procede de la religión sino de la propia naturaleza, de nuestro propio cuerpo. Y lo que nos pide el cuerpo es disfrutar, pasarlo bien: una moral basada en el placer.

Vemos, entonces, que nuestro amigo Julien era materialista, ateo y hedonista. El problema es que en el siglo XVIII eso no estaba muy bien visto, que digamos. Sus ideas le granjearon multitud de enemigos en Francia, pero más por el hedonismo y el ateísmo que por el materialismo en sí. Muchos le acusaban de defender un sistema filosófico así para justificar sus depravaciones sexuales y sus excesos, aunque no existen pruebas concluyentes de la vida disoluta que le atribuían sus coetáneos. Pero sí sabemos, y esto es relevante para el asunto que nos ocupa, que era amigo de la buena comida.

El caso es que tuvo que irse de Francia porque la cosa se estaba poniendo fea. Se fue a Holanda, donde tampoco le acogieron precisamente con los brazos abiertos. Finalmente encontró refugio en la corte de Federico II de Prusia, quien le nombró miembro de la Academia de Berlín. Y fue en esta ciudad donde encontró la muerte.

Cuentan que a finales de octubre de 1751 se celebró un banquete en la casa del embajador de Francia en Prusia. Allí estuvo La Mettrie, animando la fiesta con sus chistes y disfrutando, como buen hedonista, de la comida y la bebida. En un momento determinado se presentó a los comensales un plato de pâté de faisan aux truffes. A La Mettrie se le hizo la boca agua, y se zampó, si no el plato entero, al menos una gran parte. En alguna versión he leído que se trataba de una apuesta ("no hay narices a comerse eso entero"), o quizá fue sólo falta de autocontrol.

De un modo u otro, no fue una buena idea. La "hazaña" de La Mettrie le valió una indigestión bastante grave, quizá una intoxicación alimentaria de algún tipo. Veinte días después del banquete, murió en Berlín. Sus enemigos no perdieron la oportunidad de señalar que se lo tenía merecido por glotón, hedonista y ateo. "¿Veis a lo que lleva el materialismo?", dirían. El propio Federico II, que compuso el elogio de La Mettrie, escribió en una carta privada que había muerto por indigestión.

Pero en las muertes de los filósofos, como hemos visto hasta ahora, las cosas casi nunca son lo que parecen. Porque no está nada claro que la muerte se debiera a una indigestión, y a día de hoy no se ha podido demostrar. De hecho lo más probable es que se le complicara con alguna otra enfermedad, o incluso se agravara su estado debido a las sangrías que él mismo, como buen médico de la época, se aplicaba. Pero claro, para los enemigos de La Mettrie, y para los enemigos del materialismo en general, era más conveniente ridiculizar su muerte para ridiculizar su filosofía.

Fuentes:

  • Federico Alberto Lange, Historia del materialismo, tomo 1, Madrid 1903.
  • C. U. M. Smith, "Julien Offray de la Mettrie (1709-1751)", Journal of the History of the Neurosciences, 2002, Vol. 11, No. 2, pp. 110-124.
  • José Ferrater Mora, "La Mettrie", Diccionario de Filosofía, RBA, Barcelona 2005.
  • Wikipedia.

4 comentarios:

  1. Qué interesante este hombre, y en su época. No le conocía. Aunque sea éste filósofo, médico... pensador de la época al fin y al cabo, por su lugar y su tiempo veo una relación con el Marqués de Sade. Bueno, Sade es posterior, pero hay apenas una o dos generaciones de diferencia, y Sade fue escritor y dramaturgo, no filósofo expresamente (por mucho que en la historia del pensamiento se le nombre a veces).

    Lo que Descartes reservaba a los animales, La Mettrie a todo ser vivo: el cuerpo como una pura máquina, donde (dicho como se dice hoy desde cierta concepción dualista en filosofía de la mente) lo cualitativo 'superviene' de la biología, y ésta de la pura física.

    Aunque al parecer La Mettrie era monista.

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  2. Me alegra que lo encuentres interesante, Julián. En esta sección de muertes de filósofos quiero aprovechar para hablar de algunos autores que no son tan conocidos. Empecé por Descartes y Empédocles, y por supuesto no faltará Sócrates, pero también aparecerán algunos menos famosos.

    Efectivamente, La Mettrie, al afirmar que el cuerpo humano es una máquina, no está haciendo otra cosa que aplicar la concepción cartesiana, mecanicista, de la materia (res extensa), pero negando el dualismo de substancias.

    Muchas gracias por comentar :)

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  3. Bien por fin encuentro a alguién que habla de materialismo. Dato curioso: La Mettrie se refugía en Federicos II de Prusia porque sus enemigos no lo querían, era el consentido de su protector tanto que el mismo Voltaire lo envidio, La Mettrie fue una persona muy liberal, y a raíz de una enfermedad engendró su obra El tratado del alma, a su vez no lo querían los propios materialistas como D'Holbach entre otros, por último fue inspirador de las obras del Marques de Sade. Es todo lo que tengo que decir por ahora. Saludos.

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  4. Muchas gracias por tu comentario y los datos que aportas, Diogenes. Espero retomar pronto un ritmo de publicación normal en este blog.

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